Si, se puede colocar en perros, gatos, equinos y mascotas exóticas.
Si, este microchip cumple con las normas ISO 11784/11785 y están aprobados por SENASA para su aplicación en animales.
El microchip está dentro de una cápsula de cristal biocompatible y se aplica mediante jeringa individual esterilizada y descartable. El microchip debe ser aplicado por un veterinario, cumpliendo el protocolo de esterilización y aplicación. No tiene consecuencias en la salud del animal.
Por el momento no hay tecnología disponible para realizar esta acción. Los microchips son pasivos, es decir que no están enviando una señal permanentemente sino que cuando se le acerca un lector y el microchip entra en el campo de lectura, se activa y responde enviando su número al lector. Por lo tanto no contiene una batería, y eso permite que funcione durante toda la vida del animal.
Lo recomendable es colocarlo a partir de los 2 meses de vida en perros y gatos.
Es similar a la aplicación de cualquier vacuna subcutánea.
Si, al ser un microchip pasivo, permanece en funcionamiento en el animal durante toda su vida.
Puede identificarse cualquier mascota, ya sea de raza o mestizo.
La aplicación del microchip es una tarea que debe realizar un veterinario.
La zona recomendada en perros y gatos es subcutáneo en el costado izquierdo del cuello, detrás de la oreja.
